Otro interesante concepto “ad hoc” de lo que hablamos en el post anterior y en el mundo del business´s sneakers, es la obsolescencia percibida.
¡¡coño con la obsolecencia,
¡¡ sí ¡¡ esta ultima, la percibida, se refiere a crear en el consumidor un sentimiento de insatisfacción en relación al producto que posee (y, que aun funciona), persuadiéndolo a consumir un producto nuevo, creando la necesidad de compra y satisfacción de poseer un producto nuevo, a poco que haya cambiado su diseño, color, embalaje o incluso promoción.
¡¡Así las cosas¡¡ entroncamos con la obsolescencia de especulación (¡¡joder que pesadito¡¡) , y me atrevería a decir obsolescencia “ideada” , para vender más.
La obsolescencia de especulación apoyada en la percibida, genera en el mundo Sneakers, miles de millones de dólares , euros y pesetas para las diferentes marcas, con sus versiones : retros, “hi edicion” series limitada (incluso limitadísimas, como las Jordan UNC Converse AllStar, 30 pares), series conmemorativas MLK Martin Luther King, Jr. Day , las Xmas day, el día de navidad , la de las finals de ¿no sé que año?, las olímpicas que llevaba MJ, y las custom Jordan o Kobe o LeBron de los diferentes equipos y colores…..
…Y así todo el onanismo de los Tinker Hatfield de turno y diseñadores de todas las marcas y sus eyaculaciones en pro de innovar o falsear un supuesto producto innecesariamente “mejorado” , manejan a los consumidores (actualmente muy despistados) para mantenerse al día y a la moda, comprando y poseyendo productos casi idénticos , que los hacen parte de su identidad, distinguiéndose consecuentemente del par de Kicks anticuado que tiene su colega.
Es un hecho, que las nuevas zapatillas y sus diferentes versiones, aparecen a un ritmo sin precedentes, aumentando la contaminación de modelos para cumplir con la demanda de los consumidores,.... el resultado, no puede ser peor para el joven comprador….presión social, insatisfacción constante y derroche monetario entre otras lógicas consecuencias.
Y ahí lo
dejo ¡¡……. y yo cuando jugaba al “furgol” de junior, me cosía y
reparaba a mano las “botas” así las llamábamos, una temporada si
y la otra también, ¡¡hombre ¡¡ , cuando llovía, acababas con los pies
“encallados”, pero acababan siendo una segunda piel.
