Si guardas en tu puesto, la cabeza tranquila,cuando todo a tu lado es cabeza perdida.
Si tienes en ti mismo una fe que te niegan y no desprecias nunca, las dudas que ellos tengan.
Si esperas en tu puesto, sin fatiga en la espera.
Si engañado, no engañas,Si no buscas mas odio, que el odio que te tengan...
Si eres bueno y no finges ser mejor de lo que eres,
Si al hablar no exageras lo que sabes y quieres.
Si sueñas, y los sueños no te hacen su esclavo.
Si piensas y rechazas lo que piensas en vano.
Si te encuentras con el triunfo, si llega tu derrota,y a los dos impostores les tratas de igual forma.
Si logras que se sepa la verdad que has hablado,a pesar del sofismo del orbe encanallado.
Si arriesgas en un golpe y lleno de alegría,tus ganancias de siempre, a la suerte de un día, y pierdes, y te lanzas de nuevo a la pelea, sin decir nada a nadie de lo que es y lo que era.
Si logras que tus nervios y el corazón te asistan,aun después de su fuga, de tu cuerpo en fatiga, y se agarren contigo cuando no quede nada, porque tu lo deseas y lo quieres, y mandas.
Si hablas con el pueblo y guardas tu virtud.Si marchas junto a reyes con tu paso y tu luz.
Si nadie que te hiera, llegue a hacerte la herida,
Si todos te reclaman y todos te aprecian.Todo lo de esta tierra, será de tu dominio,y mucho más aún, serás hombre,.. hijo mío.
Joya de la literatura de Joseph Rudyard Kipling, (El libro de la Selva, El hombre que pudo ser Rey) que a lo largo de la vida cualquier hombre weno, quisiera haber escrito.